Año: 2014
País: Estados Unidos
Director: Mike Cahill
Guión: Mike Cahill
Género: Drama, Ciencia Ficción
Fotografía: Markus Forderer
Música: Will Bates, Phil Mossman
Reparto: Alessandro di Medina, Brit Marling, Àstrid Bergès-Frisbey, Steven Yeun, Archie Panjabi, William Mapother, Cara Seymour
La película cuenta la historia del Dr. Ian Gray (Michael Pitt),
un biólogo molecular que estudia la evolución
del ojo humano.
Después de un breve encuentro con una exótica joven (Àstrid Bergès-Frisbey), su trabajo va a
invadir su vida por completo.
A medida que sus investigaciones continúan junto
a su compañera de laboratorio, Karen (Brit Marling),
descubren algo sorprendente con implicaciones de amplio alcance que complican
sus creencias científicas y espirituales.
Entonces, emprende un viaje por medio mundo, en el que arriesga todo lo que
sabe para validar su teoría.
La verdad es que esta película me tiene enamorada desde el primer día, y ya la he visto más de una vez.
Dicen que no existen en el mundo dos Iris iguales, ¿es realmente así?
Ian, comenzará a buscar a su chica enigmática de ojos preciosos, y para ello se dejará en manos del destino, siguiendo las señales que este le deja. ¿Haríamos nosotros lo mismo? Seguir las corazonadas y las señales que se nos van presentando en la vida para dejar donde nos dejen.
Tras ellos encontraremos una bonita historia de amor, que conseguirá robarnos el corazón. La historia de una pequeña chica alocada y espiritual, y un científico, que no cree nada más que en las pruebas. ¿Les tendrá algo más preparado el destino? ¿Creemos en la reencarnación? Tal vez esta película consiga cambiar nuestra visión del mundo, de la humildad, del destino y sobre todo de la reencarnación, de eso no tengo duda.
106 minutos que nos sacarán sonrisas, lágrimas y suspiros, y finalmente un muy buen sabor de boca.
Todas las personas a las que se la he recomendado han acabado encantadas, ¿a qué esperas para ser una más?